Diseño y arquitectura, el secreto de una oficina eficiente
En el pasado se pensaba que las oficinas eran espacios en los que cada empleado debía tener un lugar específico y delimitado para trabajar, pero con el paso del tiempo los espacios abiertos y compartidos son cada vez más comunes.
Más allá de lo estético, este nuevo paradigma busca hacer más eficientes los recursos humanos y optimizar el espacio al crear ambientes más dinámicos, innovadores y saludables.
Además, este tipo de configuración fomenta el trabajo individual y colaborativo, la capacitación y la socialización, sin olvidarse de los distintos grados de privacidad, niveles de ruido, equipos y tecnología que necesita cada espacio.
Esta nueva estrategia se olvida del empleado “atado a su puesto” por ocho horas y le da la libertad de trabajar en lugares no asignados, alentando el trabajo en equipo.
De hecho, el cómo luzca la oficina y cuál sea la “energía” que transmita, influirá notablemente en la decisión final de un futuro empleado de aceptar el empleo en ese sitio.
El diseño de configuración abierta también fomenta la retención de talentos y contribuye a disminuir el ausentismo laboral relacionado con entornos pocos saludables.
La base de la estrategia
Según Víctor Feingold, de Contract Workplaces, existen varias tácticas para implementar esta nueva filosofía de distribución del espacio.
Espacio vs. Funcionalidad
En el pasado lo común era que los espacios en las oficinas se asignaran según jerarquías. De ese modo, directores y altos ejecutivos obtenían los espacios más grandes, mejor ubicados e iluminados aunque sus obligaciones los sacaran por horas de ellos.
Hoy en día se plantea que estos metros privilegiados deben destinarse a espacios colaborativos o puestos de alta tasa de ocupación.
La flexibilidad del espacio
Así como este concepto sabe que la tecnología permite trabajar desde cualquier espacio o momento, también asume que los espacios de una oficina deben ser multifuncionales y adaptables a las necesidades del día a día.
Aspectos claves para no olvidar
Si bien la funcionalidad y la flexibilidad del espacio son las bases tácticas para una oficina más eficiente, también existen cuatro aspectos importantes en la configuración del espacio que no deben pasarse por alto.
Libertad de movimiento
Así como este concepto de diseño apuesta por un mejor aprovechamiento del espacio, también toma en cuenta la importancia de la libertad de movimientos.
Para lograrlo, es vital que las zonas de desplazamiento estén claramente definidas y que se fundan orgánicamente con la distribución del espacio.
Cuenta con un experto
Como siempre hemos dicho, los mejores resultados siempre se obtienen cuando se consulta a un experto que sepa cómo aprovechar mejor el espacio y todos los elementos que lo rodean.
Si te quedan dudas
by SerMasivo